• La concejal de Cs en el Ayuntamiento, Amelia Velázquez, advierte de “la situación de insalubridad que se produce en la zona” y que “se ha vuelto más peligrosa desde que comenzara la pandemia del coronavirus”

 

Sevilla, jueves 29 de octubre de 2020. La concejal de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Sevilla, Amelia Velázquez, ha exigido este jueves al equipo de gobierno del PSOE “la eliminación del mercadillo y la venta ambulante ilegal” de la calle Ingeniero de la Cierva, que “amenaza la supervivencia del comercio tradicional que sí paga sus impuestos” y que “está sufriendo una competencia desleal en la puerta de sus propios negocios a la que difícilmente pueden hacer frente”. En este sentido, ha añadido que “los vecinos y comerciantes del Distrito Cerro-Amate vienen denunciando esta situación desde hace varios años”, aunque hasta el momento “solo han conseguido promesas” por parte de los distintos gobiernos municipales que “caen en saco roto y nunca terminan de cumplirse”, ha señalado.

Velázquez ha añadido que “la calle presenta una imagen lamentable en toda su extensión” como consecuencia de “la venta incontrolada de todo tipo de objetos y de alimentos en la vía pública, prendas de vestir, utensilios de hogar, frutas, verduras, material de higiene y maquillaje”, entre otros, “todo ello sin ningún control administrativo ni sanitario”. Es más, “se da la circunstancia de que en algunos casos se trata incluso de productos robados”, lo que “genera una preocupante falta de control sanitario” que “puede poner en riesgo la salud de los compradores”. Además, a todo esto se añade “la acumulación de más basuras”, incrementando “la imagen de suciedad y abandono de esta vía”, cuyo suelo presenta “un aspecto mugriento, agravado por la falta de baldeo”, ha indicado.

La concejal de la formación naranja en el Consistorio hispalense ha advertido de que “nos encontramos ante una grave situación de insalubridad” por lo que “urge que el equipo de gobierno del PSOE adopte medidas de inmediato para darle solución a un problema tan grave”. Una situación que “ya era alarmante” y que “se ha vuelto mucho más peligrosa desde que comenzara la pandemia del coronavirus en el mes de marzo”. Todo ello ha provocado que la calle Ingeniero de la Cierva sea “un constante foco de contagio”, perjudicando con ello a “los comerciantes que tienen en esta calle sus negocios abiertos” y que “cumplen con rigurosidad todos sus compromisos legales y tributarios”, ha dicho.

Velázquez ha pedido “medidas a largo plazo” que vayan más allá “de los dispositivos policiales que se instalan de manera puntual” y que, tal y como advierten los vecinos, “tienen poca eficacia”. De hecho, “las personas que organizan esta venta solo desaparecen en el momento concreto en el que los agentes patrullan la zona y luego se vuelven a instalar en el mismo lugar”. Por ello, ha insistido en la necesidad de “buscar una solución” para esta problemática que “defienda los intereses de los comerciantes” y “garantice la tranquilidad de los vecinos afectados”, ha concluido.