El portavoz de Ciudadanos reclama “mayor presencia policial y que se haga cumplir las ordenanzas” para poner fin “a los problemas de convivencia y ruidos que ocasiona el consumo de alcohol en las calles y garantizar el derecho al descanso de los vecinos de la Alfalfa y de muchas otras zonas de Sevilla”

 

Javier Millán, portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento, ha denunciado hoy “la inacción de Espadas ante el grave problema del botellón en la Alfalfa”.

Millán, acompañado de su adjunto, Francisco Moraga, ha visitado hoy la zona junto a la plataforma Alfalfa Degradada, encabezada por Silvia de Carrión, que ha transmitido el malestar de los vecinos por “el repunte en el consumo de alcohol e incluso drogas en plena calle y hasta altas horas, además de peleas, cantes, gritos y otros comportamientos incívicos ante los que el gobierno no hace absolutamente nada”.

El portavoz de Ciudadanos ha criticado “la dejadez total del gobierno socialista que ni siquiera escucha los problemas de los vecinos de los barrios de Sevilla”, y ha explicado que “los distritos no funcionan, nadie da respuesta a reclamaciones más que justas de los sevillanos y los asuntos por resolver se le acumulan a un gobierno incapaz a todas luces”.

Cs reclama mayor presencia policial y cumplimiento de las ordenanzas

Millán ha indicado que la práctica del botellón “es un problema permanente en muchas zonas de la ciudad”, como el Casco Antiguo y el foco concreto de la plaza de la Alfalfa y sus calles adyacentes, en las que los residentes soportan “ruidos hasta altas horas e insalubridad, acumulación de basura y hasta presencia de excrementos y orines”, además de “la intranquilidad que sufren por una inseguridad constante provocada por insultos, amenazas e incluso agresiones en algunas ocasiones”.

El portavoz de Ciudadanos ha finalizado reclamando a Espadas “una solución definitiva y global con un plan definido de actuaciones, que debe incluir por supuesto un aumento de la presencia policial y un férreo compromiso del gobierno para hacer cumplir las ordenanzas, algo que no está ocurriendo”, todo ello con el objetivo de “erradicar de una vez por todas el consumo de alcohol en las calles y garantizar la tranquilidad y el descanso de los vecinos”.