A continuación compartimos con vosotros la noticia aparecida hoy en El Correo de Andalucía que también podéis consultar desde este enlace
Ciudadanos, que aumenta su militancia un 30 por ciento desde septiembre, primará la calidad en la selección de candidatos para evitar los fiascos de 2015
Llegó en 2015 casi sin hacer ruido, tatuado a fuego eso del que mucho abarca poco aprieta. Tan claro lo tenían en el equipo de Albert Rivera que circunscribió su cuadrilátero electoral en la provincia de Sevilla a la capital y 14 municipios más, en especial los del Aljarafe, donde Ciudadanos le disputaba el voto al PP hasta llegar a arrebatarle Espartinas. Tres años después y no sin vaivenes –algunos candidatos salieron rana y el único feudo obtenido no ha sido un camino de rosas, con tres relevos en el bastón de mando–, la moda naranja parece que llega a Sevilla.
El efecto Arrimadas espolea la marca de Ciudadanos, que también gana terreno en Sevilla. Solo desde septiembre –en la cresta de la ola del desafío soberanista catalán–, la formación naranja ha experimentado un incremento del 30 por ciento de militantes, lo que sitúa a la provincia sevillana «en la cuarta con más inscritos de España». El secretario de Organización de Ciudadanos, Fran Hervías, de visita por la capital hispalense, fue el encargado de anunciar el «crecimiento imparable» que ya se atisbaba en las encuestas y sondeos electorales, pero que ahora ya se traduce en músculo militante, que en números globales se acerca a los 6.000 (5.765 inscritos).
Hervías, en un foro en el que no faltaron coordinadores de agrupaciones, grupos locales y coordinadores de organización territorial de la provincia, indicó que este aumento «prolongado de los últimos meses» ha permitido que Ciudadanos ya haya echado raíces «en 46 municipios, cerca de la mitad de la provincia». Una representación que el propio secretario de Organización recordó que alcanza «a un 76 por ciento de la población».
«El objetivo de Ciudadanos durante este año es consolidar al partido en toda la provincia e intentar llegar a cuantos más municipios menor», ha apuntado Hervías. Es más, fuentes cercanas a la dirección provincial confían en que, hasta las próximas elecciones municipales, Ciudadanos pueda llegar a estar presente, con listas, en alrededor de 70 municipios.Pero, más allá de la cantidad, se busca la calidad, en un intento de evitar que en la cita para las municipales de 2019 no se repitan casos tan ingratos como los de Carmen López, la edil de Castilleja de la Cuesta –expulsada del partido– que saltó a escala nacional por su petición al Consistorio de que le pagara los viajes a Chicago para asistir a los plenos; u otros concejales que llegaron a conformar el sector crítico de la formación y que ya se han desligado para crear otro partido, como Juan José Jurado (Camas), Faustino Rodríguez (Tomares) y Sonia Vallejo (Gelves).
Ciudadanos es consciente de que falló, por las prisas, el proceso de selección. Por eso «no nos vamos a obsesionar en intentar conseguir presencia en el conjunto de toda la provincia, sino que los equipos sean los mejores. En eso vamos a trabajar», manifestó ayer Hervías.
Tal es el optimismo imperante en el partido liderado por Albert Rivera, que hablan abiertamente de ser un «partido fuerte y maduro para gobernar tanto en el ámbito municipal como también en el ámbito autonómico de cara al 2019». Como ejemplo de esa madurez, el partido mira al espejo de la «oposición constructiva» que aseguran que ejercen en la Junta de Andalucía y en el Ayuntamiento de Sevilla. De hecho, en el último caso las sondeos internos le apuntan un crecimiento en ediles que le permitiría ser llave y negociar de tú a tú con PP o PSOE.