Desde Ciudadanos se muestran preocupados por el futuro del edificio que albergaba a la antigua sede de Albatros en la calle Cristo de la Sed tras “ver cómo en los últimos años se han derribado casas que eran ejemplo de la mejor arquitectura sevillana del regionalismo”
Javier Millán, portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Sevilla, ha exigido hoy al gobierno socialista “protección para el valioso patrimonio histórico sevillano” en el barrio de Nervión.
Desde Ciudadanos han reaccionado tras conocerse que el edificio que albergaba a la antigua sede de Albatros, en el número 35 de la calle Cristo de la Sed, y que no está catalogado, ha sido comprado por un inversor inmobiliario “con lo cual corre el riesgo de ser derribado para construir viviendas como ha ocurrido con otros inmuebles vecinos”.
Millán ha lamentado que en Nervión “en los últimos años se han derribado casas que eran ejemplo de la mejor arquitectura sevillana del regionalismo” destacando construcciones de Talavera Heredia y de Gómez Millán, “que estarían protegidas en cualquier otra capital como Barcelona”.
El portavoz de Ciudadanos afirma que en la capital hispalense “solo se mira al patrimonio del Casco Histórico, que igualmente está abandonado por este gobierno”, mientras que los barrios “están ya en el más absoluto de los olvidos”, sin que exista “ninguna protección en distritos como Nervión, donde se le da prioridad absoluta a la voracidad inmobiliaria sin excepciones, dejando sin alma ni identidad a Sevilla”.
“Espadas está demostrando últimamente cómo está dispuesto a vender el patrimonio arquitectónico de Sevilla al mejor postor, sin pensar en la identidad ni en el modelo de ciudad”, ha añadido Millán, que denuncia también que “el gobierno socialista se caracteriza por el abandono del patrimonio de nuestra capital” donde destaca que “las únicas actuaciones que se hacen son a instancias de Ciudadanos”.
Ante todo esto, Millán ha reclamado que “con urgencia” desde Urbanismo se realice un catálogo básico en el que se contemplen los inmuebles a proteger en Nervión, de forma que no pudieran ser derribados, lo que sería “el primer paso mientras que se elabora cabo un catálogo pormenorizado del distrito para evitar que se destruya el valioso patrimonio sevillano”.