Critica el “uso bastardo de la institución” para la mera “confrontación política” pese a las estipulaciones del reglamento

Millán Dipu Pleno Septiembre 2015

 

El portavoz de Ciudadanos en la Diputación de Sevilla, Javier Millán, ha opinado que las diputaciones constituyen a día de hoy un “colosal chiringuito político” instrumentalizado por el PP y el PSOE, para “defender sus prebendas y su clientelismo político”. Así, aunque reconoce que como instituciones prestan “servicios muy importantes a la ciudadanía”, alega que se trata de servicios que pueden ser asumidos por “otro ámbito competencial”, para prescindir de “la costra política”.

En el marco de una entrevista con Europa Press, Javier Millán ha reanudado sus mensajes respecto al papel de las diputaciones, más aún después de que la convocatoria promovida por el Consorcio Provincial de Aguas para contratar a un gerente se saldase con el nombramiento de Blas Ballesteros, concejal durante el primer mandato del alcalde hispalense Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE) y otrora cónsul de Brasil. Y es que para Ciudadanos, esta convocatoria estaría diseñada como un “traje a medida” de Ballesteros, lo que respondería a una “estrategia” de colocación.

Millán, de cualquier modo, insiste en que si bien las diputaciones gestionan actualmente “una serie de servicios muy importantes para los ciudadanos, como por ejemplo el servicio provincial de bomberos”, gracias a estas instituciones, los “dos grandes partidos de España”, es decir el PSOE y el PP, “han montado un colosal chiringuito político”.

Así, en el contexto de la controversia suscitada a cuenta de la contratación de Blas Ballesteros en el Consorcio Provincial de Aguas, adscrito a la Diputación, Millán opina que el PP y el PSOE están utilizando las diputaciones “para defender sus prebendas políticas” y sostener su red de “clientelismo”.

ERRADICAR “LA COSTRA POLÍTICA”

“Es verdad que la Diputación gestiona una serie de servicios muy importantes para los ciudadanos y hay una gran labor de unos técnicos muy cualificados”, admite Millán, argumentando no obstante que tales servicios “se pueden gestionar desde otro ámbito competencial”, para prescindir “de toda la costra política del bipartidismo”.

“Han montado un colosal chiringuito político”, ha insistido Millán, reclamando al PP y al PSOE que no se “refugien” en la labor que presta la plantilla de la institución provincial, que puede ser gestionada desde “otros ámbitos”. Un buen ejemplo de la deriva de la Diputación, según expone, es que “la mayor parte” del debate plenario se dedica a mociones y proposiciones políticas “que no tienen” relación directa con los asuntos y problemas singulares de la provincia.

Al respecto, ha acusado a los partidos de la ‘vieja política’ de incurrir en un “uso bastardo de la institución” provincial, para instigar la mera “confrontación política”, cuando incluso “el propio reglamento de organización de la Diputación estipula que no se pueden llevar mociones ajenas a la provincia”. “Eso se está incumpliendo”, ha alertado.